domingo, 7 de diciembre de 2008

cuatro


Ahora ya solo es un recuerdo.

Recuerdo todo aquello como si hubiese sido un sueño.. a pesar de su intensidad en aquel momento.

Es lo increible del tiempo. Esa magia que hace que todo sea efímero y tan solo puedas acariciarlo por encima con los dedos.

Porque parece que fué en segundos. Sucedió y queriendo pero sin hacer nada se olvidó.

No te has dado cuenta y hoy puedes compararlo con la consistencia de una historieta,una anecdota, una página en el libro de tu vida.

Es como una escala de intensidad que te sube hasta lo más alto viendote entonces incapáz de bajar.

Tu vida gira en torno a eso tanto tiempo como tu no quieras.Sales pensandolo, duermes pensandolo y te despiertas cada mañana por esa ilusión que te ayuda a seguir, a levantarte y a vivir.

Llega un momento en el que te das cuenta de que algo no tiene sentido, que el amor no era así, que lo debes afrontar y decirle realmente lo que sientes, abrirle tu corazón sin pensar en las consecuencias que aquello supondria.

Crees que has acertado y te sientes bien,has hecho lo que debias ahora solo queda esperar..


Al cabo de un tiempo desearias no haberlo hecho nunca.

Le odias tanto que le quieres, te da tanta rabia que desearias no verle jamás.. pero verle siempre.

Y le ves ; y después de tanto tiempo esperando ese momento se va igual que llegó, para tu sorpresa el tiempo no se ha parado, no han habido miradas complices ni sonrisas preciosas como un par de años atrás.

Sigues y sigue. Te desengañas, te das cuenta de que estas historias no son como te las venden.No son los cuentos que mamá te contaba antes de dormir ni son las historias de las pelis de walt disney, cuyas escenas aún hoy te vienen a la cabeza con un sabor dulce y cierta nostalgia..

Tras aprender muchas cosas, tiempo después le vuelves a ver.Una lágrima se desliza por tu mejilla,una lágrima de felicidad, una lágrima llena de amor,pero de amor propio.

Durante todo este tiempo que tan mal lo has pasado, sin querer ha crecido tu seguridad,tu orgullo, has crecido tu.

Hacia él, indiferencia.. y sorpresa.

Sorpresa porque hoy me pregunto qué me enamoró de ti, porque no logro comprender qué fué lo que me cegó para seguirte allá a donde fueras y demostrarte que podiamos intentarlo de nuevo.

Aunque realmente aquello lo recuerdo como un sueño, casi como si en realidad no hubiera pasado, casi como si no te conociera. Porque no eres el mismo que era, porque has cambiado, y he cambiado. Y cada uno seguimos nuestro camino.

Tú con miles de experiencias menos, y yo con una experiencia más.

3 comentarios:

brevedaddelosdias dijo...

sabía que tu regreso no defraudaría :)

brevedaddelosdias dijo...

y un coño

Elena-na dijo...

no volvias en primavera? pues ya es primavera. ahora que zarza